La esencia de la verdadera poesía

¿Qué es la poesía? ¿Por qué hay gente que opta por expresarse mediante este recurso? Parecen unas preguntas simples, elementales, pero son una absoluta complejidad para aquellas personas que sienten las ansias de versificar. El verdadero poeta vive unas palpitaciones, unas voces internas que le murmuran y le suplican, que no le dejan tranquilo hasta que ese pensamiento se muestra mediante un papel que lo hace realidad. La auténtica poesía nace a partir de una inquietud, no una obligación, y esa es la esencia de que el lenguaje poético sea uno de los pilares artísticos de la humanidad.

No se puede hacer un buen poema si no se siente la inspiración desde el corazón; es decir, la necesidad de componerlo debe ser tomada por la emoción por encima de la razón. Puede tener métrica, rima o una gran cantidad de recursos estilísticos, pero son los sentimientos los que forman su base principal. La poesía insípida es poesía sin alma, forzada, y alejada de su poder a conducirnos a la sensibilidad.

¿De dónde sale la inspiración? La inspiración puede surgir de cualquier cosa proveniente de la vida cotidiana, pero es el corazón el que ha de dar su aprobación. La tristeza que sentimos en un momento concreto, el aroma de unas flores o las emociones reflejadas por una expresiva mirada. Son infinitos los temas que se pueden utilizar, pero he aquí lo más importante: la subjetividad y la humanidad si se quiere hacer al lector cautivar.

A pesar de todo esto, nunca se ha de buscar la fama o que la gente hable bien acerca de lo que el propio poeta escriba. Lo importante es manifestar los latidos que realmente se quieren desahogar.

Cumplir con el objetivo del arte: causar la conmoción hacia el receptor. Este es el fundamento principal que tiene una buena poesía. El autor es la persona que se siente más identificada con el escrito; por tanto, el creador es la persona que más se debe conmover. Si el poeta se queda pasivo con su obra, no es digno de que los demás lo puedan contemplar.

Como conclusión, se ha de especificar que la poesía es una de las formas más sinceras y apasionadas para mostrar la belleza de la palabra. La inquietud en el alma es la causante de indicar el tema. El resto de los aspectos (rima, métrica, versos libres, recursos estilísticos...) sólo son complementos que se utilizan para hacer que esos versos sean una realidad.

Tal como escribió León Felipe:

Deshaced ese verso.

Quitadle los caireles de la rima,

el metro, la cadencia

y hasta la idea misma.

Aventad las palabras,

y si después queda algo todavía,

eso será la poesía.