"La sombra del ala" (Amado Nervo) y Poema XVII de "Quadern vermell" (Joan Valls
Esta semana se han escogido estos poemas para representar los sentimientos del poeta y para representar el rápido transcurso del tiempo. ¿Qué os sugieren? Solo lo averiguaréis si leéis los poemas siguientes.
Castellano
La sombra del ala (Amado Nervo)
Tú que piensas que no creo cuando argüimos los dos, no imaginas mi deseo, mi sed, mi hambre de Dios; ni has escuchado mi grito desesperante, que puebla la entraña de la tiniebla invocando al Infinito; ni ves a mi pensamiento, que empeñado en producir ideal, suele sufrir torturas de alumbramiento. Si mi espíritu infecundo tu fertilidad tuviese, forjado ya un cielo hubiese para completar su mundo. Pero di, ¿qué esfuerzo cabe en un alma sin bandera que lleva por dondequiera tu torturador ¿quién sabe?; que vive ayuna de fe y, con tenaz heroísmo, va pidiendo a cada abismo y a cada noche un ¿por qué? De todas suertes, me escuda mi sed de investigación, mi ansia de Dios, honda y muda; y hay más amor en mi duda que en tu tibia afirmación.
Catalán
Poema XVII de Quadern vermell (Joan Valls i Jordà)
El viure ens lliura el seu calidoscopi
per confondre'ns el curs de la lliçó.
Sols hem après la dura noció
de saber l'escassesa del bé propi.
Ara un voltor sinistre ens amenaça
amb la isòcrona fúria animal,
mentre l'esquinçador colp de destral
ferament a les sordes ens corglaça.
Si dirigim l'esguard al camí antic
farem la paràbola d'aquella dona
salinificada per massa bona
en contradir el llamp del foc diví,
car l'eruga del viure ens erosiona
per estar més lleugers fins a la fi.
(Traducción: Poema XVII de "Cuaderno rojo")
El vivir nos libra su calidoscopio
para confundirnos el curso de la lección.
Solo hemos aprendido la dura noción
de saber la escasez del bien propio.
Ahora un buitre siniestro nos amenaza
con la isócrona furia animal,
mientras el desgarrador golpe de hacha
fieramente a las sordas nos sobrecogen.
Si dirigimos la mirada al camino antiguo
haremos la parábola de aquella mujer
salinizada por demasiado buena
en contradecir el rayo del fuego divino,
la oruga del vivir nos erosiona
para estar más ligeros hasta el fin.
Traducción: Jorge de la Fuente