"Siempre a tu lado, Hachiko", una historia de eterna fidelidad
Este artículo está dedicado a una de las historias más cautivadoras en cuanto se refiere a la interacción entre el animal y el hombre. Siempre a tu lado, Hachiko es una película dirigida por Lasse Hollström que refleja que los animales pueden llegar a ser más fieles que las personas a través de su conmovedor final.
Parker Wilson es un profesor que da clases de música en una universidad. Cuando va de camino a casa, se encuentra con un cachorro abandonado. Él lo coge y decide llevárselo a casa, provisionalmente, hasta que hallase a alguien que reclame su pertenencia. Se trata de un perro de la raza asiática Akita. En el momento que Parker entra con el animal a casa, su mujer, Cate, le insiste que no quiere aquel nuevo visitante dentro del hogar. Él la convence de tal forma que el perro se quede con ellos, pero por poco tiempo, hasta que alguien confirmase quién es su dueño.
Parker decide ponerle el nombre de Hachiko. Pasa el tiempo y el animal no es reclamado. No obstante, Cate se encariña del can y, en consecuencia, decide que el perro viva con ellos.
Parker y Hachiko crean un vínculo sincero entre amo y mascota. Tan auténtica es su unión que se forma un curioso suceso todos los días que él tiene que ir a trabajar. Hachiko acompaña a su dueño hasta la Plaza de la Estación y, cuando el tren desaparece con el profesor a bordo, él regresa a casa. A la hora que Parker vuelve, el perro corre hasta la Plaza de la Estación y se sienta, siempre en el mismo lugar y en la misma posición, esperando a su amo con grandes muestras de cariño y alegría.
Este hecho se repite todos los días que Parker va a la universidad. Día tras día, el animal hace que una sonrisa se pose sobre su destinatario. Nadie sabrá hasta qué punto la lealtad de aquel perro será tan grande, tan sincera, que Hachiko siempre esperará, a pesar del destino y las omnipotencias, a un hombre que siempre será su amigo y que nunca osará romper su amistad.
Esta película es una gran herramienta para reflexionar en qué consiste la verdadera fidelidad. Fantástico papel de Richard Gere y de Joan Allen que se adentra perfectamente en los acontecimientos del relato.
Cabría destacar que la verdadera historia de Hachiko ocurrió en Japón, en el lugar donde, posteriormente, levantaron una estatua de bronce en su honor. Lasse Hollström decidió cambiar el ambiente de la historia, haciendo una nueva versión de la película japonesa de 1987 Hachiko monogatari, a un ambiente propiamente americano y del siglo XXI al que estamos acostumbrados a ver en las películas de Hollywood. A pesar de eso, el argumento está muy bien elaborado y, por lo tanto, la esencia fundamental de la obra se conserva con la misma fuerza.
También hay que resaltar la banda sonora, una música maravillosa compuesta por Jan A.P. Kaczmarek. Aquí os añado las dos mejores composiciones: Goodbye y To train together.
Como conclusión, se ha de especificar que esta película es absolutamente cautivadora, a pesar del cambio de contexto, y que se adentran en el alma de aquellos que la visualizan.
Dando fin al artículo, os dejo una imagen de la obra y algunas de sus frases célebres:
La mujer de Parker, Cate, se acerca a Hachiko, el perro que siempre será fiel a pesar de las adversidades.
“—Es un encanto, ¿le has puesto nombre?
—Ya lo creo: invitado temporal.”
“Tú lo has encontrado a él, o él a ti. Quién sabe. Es el destino.”
“—¿Quieres a mi hija?
—Sí señor. La quiero.
—Eso está bien, porque es lo que debes recordar cuando tengas un mal día.”
“—Los Akitas no suelen complacer a la gente.
—¿Qué hacen?
—Va al tren porque tiene un vínculo especial contigo.”
“No puedes comprarles. Son japoneses, no americanos. Para ir a buscarte algo, deberá ser por algún motivo especial.”
“Suelo pensar que hay un elemento en la música que no se puede capturar: la vida no puede capturarse, no puede capturarse el corazón humano. El mismo momento de la creación es efímero.”