"Rima LII" (Gustavo Adolfo Bécquer) y "Sentit a la manera de Salvador Espriu" (S
Las poesías de esta semana tratan de un mismo tema: la muerte. La muerte expresada de dos formas absolutamente diferentes. ¿Os gusta más la visión de Gustavo Adolfo Bécquer o la de Salvador Espriu? Leed los dos poemas y, a partir de aquí, podréis juzgar vosotros mismos.
Castellano
Rima LII (Gustavo Adolfo Bécquer)
Olas gigantes que os rompéis bramando en las playas desiertas y remotas, envuelto entre la sábana de espumas, ¡llevadme con vosotras! Ráfagas de huracán que arrebatáis del alto bosque las marchitas hojas, arrastrado en el ciego torbellino, ¡llevadme con vosotras! Nube de tempestad que rompe el rayo y en fuego ornáis las sangrientas orlas, arrebatado entre la niebla oscura, ¡llevadme con vosotras! Llevadme, por piedad, a donde el vértigo con la razón me arranque la memoria. ¡Por piedad! ¡Tengo miedo de quedarme con mi dolor a solas!
Catalán
Sentit a la manera de Salvador Espriu (Salvador Espriu)
He de pagar el meu vell preu, la mort,
i avui els ulls se'm cansen de la llum.
Baixats amb mancament tots els graons,
m'endinsen pel domini de la nit.
Silenciós, m'alço rei de la nit
i em sé servent dels homes de dolor.
Ai, com guiar aquest immens dolor
al clos de les paraules de la nit?
Passen el vent, el triomf, el repòs,
per rengles d'altes flames i d'arquers.
Presoner dels meus morts i del meu nom,
esdevinc mur, jo caminat per mi.
I em perdo i sóc, sense missatge, sol,
enllà del cant, enmig dels oblidats
caiguts amb por, només un somni fosc
del qui sortí dels palaus de la lluna.
(Traducción: Sentido a la manera de Salvador Espriu)
Tengo que pagar mi viejo precio, la muerte,
y hoy tus ojos se me cansan de la lluz.
Bajados con falta de fuerza todos los escalones,
me adentran por el dominio de la noche.
Silencioso, me levanto rey de la noche
y me sé sirviente de los hombres de dolor.
Ay, ¿como guiar este inmenso dolor
al cercado de les palabras de la noche?
Pasan el viento, el triunfo, el reposo,
por hileras de altas llamas y de arqueros.
Prisionero de mis muertos y de mi nombre,
devengo muro, yo caminado por mí.
Y me pierdo y soy, sin mensaje, solo,
más allá del canto, en medio de los olvidados
caídos con miedo, solo un sueño oscuro
de quien salió de los palacios de la luna.
Traducción: Jorge de la Fuente